Capítulo 10: With the lights out, it's less dangerous??

Hoy es un día negro, siento pena, incomodidad, cierto malestar que no me deja tranquilo. Les contaré lo que pasó.

4 a.m. Se oye un ruido estremecedor en mi cuarto y me despierta. Exaltado, pero somnoliento lo ignoro ( a quién diablos se le ocurre hacer eso frente al ruido =__=), a oscuras me dirijo al bar, saco la botella de Fanta , me sirvo un vaso, lo tomo y vuelvo a dormir.

6 a.m. Suena el despertador, es hora de alistarme para ir a la típica clase de lunes por la mañana, me estiro y mis huesos crugen. Bajo un pie, con pesadez el otro, estoy parado y bostezando.... de pronto miro al rincón de la guitarra que me dejó mi abuelo y palidezco

ES HORA DEL ESPECTÁCULO!, la gente recibe lo que desea.

La pequeña yace partida en dos: cuerpo y alma, madera y más madera. Y yo quedo ensimismado mirando el rincón y con muchas preguntas encima, donde el ¿cómo? se convierte en protagonista.

Trato de verlo lúdicamente, talvez rompo cosas con la mente, o soy un sonámbulo estresado, o quizás el alter ego de algún The Who intentando romper guitarras en mi "escenario". Pero no, uno regresa a la realidad, lo analiza de nuevo, no halla respuesta, pregunta a la convención, la experiencia responde:

Y las cuerdas tensas no pudieron controlarse,
y el cuerpo desgastado no fue capaz de aguantar,
y la presión se convierte en retazos obsoletos
y alguien espera que se pueda remediar

=( mi guitarra!!!